Este plato fue una ocurrencia de mi cuñado Rafa. Tenía por ahí unas patatas fritas que habían sobrado, y unos cuantos níscalos que acabábamos de coger, e improvisó este agradable revuelto, donde las patatas suavizan el intenso sabor de las setas y lo hacen sencillamente delicioso.
Níscalos, 500 gr aproximadamente
2 ó 3 ajos
Aceite y sal
Una patata mediana
Un huevo, o dos
Ponemos un poco de aceite en una sartén y doramos unos ajos a rodajas. Añadimos los níscalos bien lavados y cortados, añadimos sal y los dejamos hacerse a fuego moderado hasta que se consuma todo el agua que sueltan. Por otro lado, freímos la patata cortada a tiras, sin hacerlas demasiado, que queden fritas, pero más bien blancas.
Cuando los níscalos estén terminados, les añadimos las patatas, y lo seguimos cocinando un minuto más para que las estas se impregnen bien y se ablanden. Por último, añadimos el huevo, lo cuajamos, revolviendo todo el conjunto, y listo.
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